¿Qué representa una cabeza de lobo cortada?

Están apareciendo lobos muertos expuestos, exhibidos, en varios puntos de Asturias. Ahora ha sido en Salas, la cabeza cortada de un lobo anciano ha aparecido colgando de una señal de tráfico.

Sabemos qué es esto: usar el sufrimiento y la muerte de un animal inocente para seguir causando sufrimiento, para extenderlo y ampliarlo a aquellas personas a quienes nos importa. No es nada más, pero ¿qué representa? ¿qué significa?

Quienes lo hacen esperan ejercer así presión contra las restricciones administrativas para cazar al lobo y contra su protección legal. Pero no lo consiguen, porque esta cabeza de un lobo anciano, nos hace conscientes de muchas cosas que no querrían que supiéramos, entre ellas de nuestra fuerza.

Nos hace conscientes de que las concesiones cobardes de los gobiernos cobardes admitiendo que se mate un número de lobos al año para saciar la sed de sangre tienen el efecto de aumentarla en quienes, más allá de las razones que fingen defender, simplemente los odian.

Nos hace conscientes de que el impuesto revolucionario que pagan los gobiernos por cada animal que los lobos matan a los ganaderos para apaciguarlos, que no para otra cosa, ha servido para el fraude sistematizado y para generalizar la idea de que pueden lograrse beneficios amenazando con matar a los lobos.

Solo ha servido como efecto de llamada para unir a los corruptos, a los ávidos de dinero, a este grupo terrorista.

Solo ha servido para que se vea a los lobos como un grupo de rehenes con cuyas vidas se puede extorsionar a las administraciones a un bajo coste, porque nuestra ley no permite castigarles con justicia.

Y por eso ha servido también para que veamos que nuestra ley no es justa. Y servirá para que nos unamos para cambiarla, porque cuando la ley no es justa debe cambiarse.

Lo que representa la cabeza de este lobo anciano muerto es cómo esconden sus actos en la noche.

Representa vuestro miedo, cobardes.

Representa vuestra pequeñez, pigmeos.

Representa nuestra fuerza, pues os escondéis de nosotros, temiéndonos.

Representa que conocéis y reconocéis vuestro fracaso para vestir de ideas y para defender con hombría de bien aquello que decís creer justo. Representa el reconocimiento no solo de vuestra mezquindad, sino de la de vuestros argumentos.

Y sobre todo lo que representa la cabeza de este lobo anciano es a la impotencia intentando intimidar a la justicia y a la belleza para esconder la vergüenza que le causa ser consciente de su fláccida incapacidad al encontrarse ante ellas.

Pero eso es lo que representa, y por patéticos que os muestre, eso no nos hará olvidar ni perdonar que habéis matado y exhibido a los más débiles que vosotros solo porque podíais hacerlo. Sin importaros, disfrutando con ello.

Habéis declarado con vuestros actos la intención de separaros de las leyes, de burlarlas sabiendo lo débiles que serían con vosotros. Hemos tomado nota.

Ni os perdonamos ni olvidamos, cuando vuestros nombres salgan a la luz no esperéis respeto, no esperéis únicamente tribunales. Esperad la vergüenza, esperad ser exhibidos, expuestos. Porque es justo hacer justicia.